El alcalde Luis Revilla informó que el municipio evalúa las acciones legales que tomará en contra de la Unidad Operativa de Tránsito por cerrar sin autorización municipal la calle Ayacucho, por construcción de la Casa Grande del Pueblo. Señaló que la autorización de este corte es tuición de la comuna y no de Tránsito.
El fin de semana, la Dirección Departamental de Tránsito anunció el corte al tráfico vehícular de un tramo de calle Ayacucho por el lapso de un año a partir del lunes 3 de agosto. El corte se debe a la edificación de la Casa Grande del Pueblo.
"Estamos evaluando las acciones legales que vamos a tomar contra Tránsito porque no tiene la atribución de hacer el cierre”, señaló ayer el burgomaestre.
Aclaró que esa determinación viola leyes municipales y la Constitución Política del Estado, que da al municipio tuición sobre las vías. Por ello -dijo- el departamento jurídico de la comuna analiza el caso.
"No hemos recibido ninguna notificación, nadie nos ha comunicado sobre un cierre y hay una autoridad que esta vulnerando flagrantemente la ley. No había ninguna dificultad en que se nos informe, coordinemos y llevemos adelante las cosas de manera legal”, sostuvo Revilla.
Proyecto de la Casa Grande
La construcción de la Casa Grande del Pueblo fue declarada prioridad nacional mediante Ley del Estado Plurinacional N° 313, promulgada el 7 de diciembre de 2012. La obra fue adjudicada por 231,6 millones de bolivianos que provienen del Tesoro General del Estado.
La infraestructura final, de acuerdo al proyecto, tendrá un helipuerto y 29 niveles, de los cuales 23 servirán como salas de reuniones, despachos, auditorios y oficinas. Además contará con un parqueo presidencial, sótanos y un nivel de ventilación.
La construcción comenzó en el pasado mes de enero. Se prevé que esté concluida en 2016.
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